HOMENAJE A PAULO FREIRE: Claudia Costín y Pablo Gentili estuvieron en Rayuela
— Comentarios desactivados en HOMENAJE A PAULO FREIRE: Claudia Costín y Pablo Gentili estuvieron en Rayuela 44A 100 años del nacimiento de Paulo Freire, conversamos con Claudia Costín, ex secretaria de Educación de Río de Janeiro (Brasil) y con Pablo Gentili, ex secretario ejecutivo del Consejo Latinoamericano de Ciencias Sociales (CLACSO).
Dos referentes de la educación en América Latina compartieron el impacto de la pedagogía del pensador brasilero, no sólo en sus trayectorias, sino más allá de las fronteras de la región.
Costín, que actualmente trabaja para el Grupo de Estudio Innovation and Excellence in Education Policies, comenzó explicando por qué considera a Freire como su ídolo: “Era al mismo tiempo una persona que se comprometía con las luchas del pueblo pero que también pensaba adelante de su época, era innovador. No tenía miedo de la tecnología, de quebrar paradigmas. Los educadores que no están enfocados en estas luchas miran con admiración la tecnología pero piensan que va a substituir a los maestros. Y no es ni una cosa ni la otra, las dos juntas son muy importantes. No hay una educación buena si no es emancipadora”.
Pero ¿cuál es la razón por la que el autor de grandes obras como Pedagogía del oprimido y Pedagogía de la esperanza aún es considerado un referente en la educación latinoamericana? Costín lo argumentó con claridad: “Él decía que el aprendizaje debe estar en las vivencias del alumno. Usó esta idea para el contexto brasileño de los años 50, para decir ‘si queremos alfabetizar a los campesinos tenemos que hablar de su realidad, si queremos alfabetizar a los trabajadores de la construcción civil es importante hablar, por ejemplo, de los materiales, empezar con palabras que registren”.
“Freire decía que tenemos que enseñar a los estudiantes a ser pensadores autónomos”, agregó quien también fuese directora superior de Educación del Banco Mundial entre julio de 2014 y junio de 2016. “En tiempos de la 4ta revolución industrial, nada más contemporáneo. Tenemos que enseñarles a pensar y que puedan elaborar sus propios juicios y pensamientos. En tiempos de robots que pueden desarrollar trabajos que demandan competencias intelectuales, saber pensar independientemente y colaborar en la resolución de problemas complejos es muy importante para el ser humano”.
Durante el programa se escucharon los mensajes de Lidia Rodríguez, autora de “Paulo Freire, una biografía intelectual” y de Adriana Puigross, ex secretaria de Educación del Ministerio de Educación de la Nación de Argentina, quienes hicieron mención a la importancia del legado de Freire en la cultura.
Respecto de la vigencia de las ideas del brasileño, Clostin sostuvo que “siempre tuvo una mirada contextualizada y trabajando la idea del pensamiento crítico. Hoy, nosotros caminamos en una dirección opuesta a la de Freire pero nunca fue tan urgente rescatarlo porque él tiene respuestas para lo que sucede hoy. Cuando fue secretario de educación de San Pablo trabajó mucho con un uso inteligente de la tecnología. No era un negacionista de los avances tecnológicos, quería que estuviesen al servicio del hombre y de la mujer. No que fuera un fin en sí mismo”.
En la actualidad, las ideas de Freire son muy criticadas por el presidente de Brasil, Jair Bolsonaro. Costín comentó que “es muy triste, como si los tiempos se pusieran muy oscuros, como si quisiéramos resucitar valores de la Edad Media, del feudalismo”. Y continúa: “La opresión que está vigente en Brasil hoy es tan grande, con censura de académicos, profesores universitarios, con una visión negacionista de la ciencia, un subfinanciamiento de las instituciones de la enseñanza superior así como primaria y secundaria. Festejar el centenario de Paulo Freire es muy importante para celebrar la resistencia. Y lo vamos a hacer juntos”.
Pablo Gentili, Secretario de Cooperación Educativa y Acciones Prioritarias del Ministerio de Educación de Argentina, señaló sobre lo que sucede en el país vecino: “El festejo por los 100 años del nacimiento lamentablemente en muchos lugares no se está haciendo porque el propio gobierno no lo está promoviendo. Pero esta recuperación que se hace de la obra de Paulo nos inspira a pensar muchos de los desafíos presentes y futuros que tiene la educación en América Latina y en el mundo”.
Gentili recordó su aproximación con el trabajo del autor brasileño durante los años 70 y 80: “Cuando entré en la universidad, en el final de la dictadura, yo quería ser dos cosas en la vida: marxista y freudiano. Y Paulo Freire era como una especie de imposibilidad porque para entenderlo había que leer su obra y en la dictadura estaba prohibidísimo. Él vino a la Argentina en el 85 y marcó una cuestión que me acompaña hasta hoy: que la idea de educación está siempre asociada a la idea de futuro. Cuando esto deja de suceder, la educación se empobrece, pierde fuerza, dinamismo y el debate también se hace más frágil”.
Nuestro invitado también habló sobre el manuscrito de Pedagogía del oprimido. En 1968, el intelectual brasileño estaba exiliado en Chile y, antes de emigrar a los Estados Unidos, le dejó el borrador a su amigo Jacques Chonchol.
Paradójicamente, el manuscrito sobrevivió los diversos exilios de Chonchol y las censuras de las dictaduras latinoamericanas que se instalaron en la región durante los años 70.
“Los que trabajamos en el campo de la educación tenemos que animarnos a hacer algo que Paulo Freire se animó a hacer, que es imaginar nuevos horizontes para la pedagogía. Estamos en un momento de extrema complejidad y no podemos conformarnos con lo que tenemos”. Dijo Gentili y amplío: “Freire imagina la pedagogía como una herramienta creativa, intelectual, productiva. Un libro como La Pedagogía del Oprimido marcó generaciones y generaciones de educadoras y educadores. Tenemos que seguir escribiendo libros como esos y para eso tenemos que pensar, estudiar, mejorar nuestras universidades y transformarlas en lugares creativos que nos permitan tener tantas obras como estas, que marcaron una época y pusieron a Paulo Freire entre los grandes intelectuales del mundo”.